iSleep Hotel es el primer alojamiento cuyo diseño y método de edificación ha seguido estrictamente los modernos criterios de la construcción ecológica durante todo su proceso constructivo. Incorpora los últimos adelantos en arquitectura sostenible que reducen el consumo energético en más del 40% respecto a un hotel convencional.
Materiales Sostenibles
En todo su proceso de construcción se ha evitado, en la medida de lo posible, los materiales nocivos para el medio ambiente, y se ha maximizado el uso de materiales reciclados, reciclables, o aquellos que emitieron valores mínimos de CO2 durante su proceso de fabricación. Se prescinde por ejemplo del uso de materiales como el PVC, se utilizan solo pinturas ecológicas sin metales pesados, materiales de construcción ecológicos como paneles a base de madera en un 70% y ligantes inertes derivados de sustancias residuales, o cauchos a base de neumáticos reciclados.
Construcción Ecológica
Los métodos tradicionales de edificación requieren normalmente entre 1 y más de 2 años para la construcción de un hotel. El hotel iSleep se ha construido mediante innovadoras tecnologías de prefabricación modular que permiten reducir el plazo de construcción a menos de 4 meses, reduciendo así las emisiones de CO2 derivadas del mismo proceso de construcción (maquinaria, generadores, vehículos, etc.).
Arquitectura Bioclimática
El edificio incorpora diversos sistemas que reducen el consumo energético de forma natural, y consiguen que hasta el 50% de la energía consumida sea renovable. La energía utilizada es de tres tipo: solar térmica, solar fotovoltaica, y geotérmica.
Algunos ejemplos son el uso de captores solares, lamas parasol en las ventanas, o galerías subterráneas para refrescar el aire. Otros elementos que optimizan el gasto energético son la iluminación de bajo consumo o el elevado índice de protección térmica (y acústica) conseguido gracias a la combinación de un avanzado diseño de tabiquería, ventanas, puertas y estructuras optimizadas para reducir los puentes térmicos.
Algunos ejemplos son el uso de captores solares, lamas parasol en las ventanas, o galerías subterráneas para refrescar el aire. Otros elementos que optimizan el gasto energético son la iluminación de bajo consumo o el elevado índice de protección térmica (y acústica) conseguido gracias a la combinación de un avanzado diseño de tabiquería, ventanas, puertas y estructuras optimizadas para reducir los puentes térmicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario